Madrid, 05-12-2024

 

HUIREMOS JUNTOS

 

Sin marcar el destino
porque no nos importa
sino el puerto que nos acoja,
llenamos las maletas
de ilusiones,
metimos unas gorras
por si acaso
y unos buenos zapatos,
la andadura está esperando.
La guerra no entra en nuestros planes
Y en este litoral
lavas escupen calaveras.

 

ANA VELASCO
Talleres de Poesía Grupo Cero

 



Madrid, 12
-12-2024

 

¡ATRÁS Y SIEMPRE ATRÁS!

 

Gruta oscura y húmeda da a luz a la curiosidad del hombre,
De esas entrañas emerge vaporosa y silenciosa, liviana,
Como un viento ágil,
Como la estrella tintineante oculta en el horizonte.
Curiosidad enigmática,
De caminos sin trazo, sin ruta, ni destino,
Curiosidad viajera, de pasado, presente, futuro,
De semilla germinando,
De pájaro muriendo.
La pequeña luz se ha estancado,
Inesperadamente volvió a la gruta,
Humedeció sus labios,
Bebió aguas olvidadas,
Insalubres, turbias,
Besó a la muerte en los labios,
Fue tocada por la sal.
Su cuerpo arde,
Como un enorme raspón, carne quemada,
Como un fuego desbordado el día de San Juan.
La curiosa flama, no distingue:
El fuego ¿la alivia o le mata de a poco?
Voces minúsculas le salen del pecho,
Gritos deformados,
Mensajes descodificados,
Imágenes oscurecidas, raídas,
¡Atrás y siempre atrás!
Escucha tenue,
La mirada perdida,
La boca seca,
La sangre en la saliva,
¡Atrás y siempre atrás!
Le susurran trémulas,
Le golpean a la cara las palabras,
Caricias silábicas,
Fonemas estridentes.
Con el puño cerrado,
Y la piel sucia de tierra,
Con el último suspiro
Que impulsa su ascenso,
Con el esqueleto crujiente,
Como hierro oxidado,
Con la estrella en los ojos,
Susurra su última oración al viento:
¡Atrás y siempre atrás!
En la noche ha ganado un camino,
Camino abierto a las bifurcaciones de los planetas.

 

LízRA
Talleres de Poesía Grupo Cero

 



Madrid, 18-12-2024

 

EL DESPERTAR DE LOS EJECUTIVOS

 

Tal vez nunca lo pude decir,
yo fui una ejecutiva de grandes avenidas,
mis horas transcurrieron de oficina en oficina
practicando los acuerdos y las negociaciones,

calculando beneficios, convenciendo a los inconvencibles,
consultaba en mi libreta de fórmulas la palabra exacta
para que firmaran un rato de tregua.
Las noches apagaban todos los discursos,
las calles, ahora grises y sucias, eran otra selva
donde el alcohol y la ruina se mezclaba con las celebraciones
del nuevo rolex o de la casa en Fiyi, allí estaba yo,
con mis altos tacones trotamundos, con mi gran escote pasajero,
con mis rojos labios convincentes, con mi bolso vacío de sentidos.
Yo también fui una ejecutiva y tuve compañías exitosas,
lucí joyas imprevistas y me codeé con ostentosos forasteros.
Allí, en las ciudades incorregibles, peiné todos mis sueños lascivos,
olvidé mi infancia y el patio de mis juegos,
el silencio del pueblo, los ruidos de las fábricas.
Fui presa de vastas ilusiones, la riqueza casi me subleva,
me dejé engañar por los escaparates donde duermen perros vagabundos,
calles donde pasean policías y limusinas, actores de un circo fracasado.
Sí, casi traicioné mi clase obrera, mis manos productoras, mi piel morena,
quise blanquear los necesarios pecados infantiles, olvidar los amores escolares,

quise ser diosa de las finanzas y casi finalizo con una pútrida estampa.
Perdón les pido compañeros, por las protestas que no hice, las miradas bajas,
los silencios que otorgan y las palabras que ofenden por denuncia falsa.
Perdónenme, les pido, no sabía de mi alma tan vacía, de esa tierra tan secana.
Vuelvo a vosotros, siempre estuve, no sirvo para hembra amaestrada y vivir en una jaula.

 

Helena Trujillo
Talleres de Poesía Grupo Cero

 


Selección de Poemas Inéditos

 

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