EMBUDO LOCO
Una nube rota está salpicando de mugre al universo,
ocasión para reunir a estadistas y soplones,
que siguen divagando sobre un círculo cuadrado
si hay que solicitar dialogo o penal para la niebla.
La ojeriza ha pintado tejados y balcones,
un millar de medusas bailan sobre el mar de polímero,
todos saben del estéril dominio de este cónclave
pues se encajan las voces en un vano.
Con el cuerpo suspendido en dos muletas,
la algarabía de un viernes negro
dibuja la silueta de un embudo loco,
al que arrastrar la ingenuidad de los melancólicos.
Mientras, el negocio del aciago oráculo persiste.
ANA VELASCO
Escuela de Poesía Grupo Cero
Taller Sábados 16 h. Madrid
Coordinadora: Carmen Salamanca Gallego
AZUL DEL TIEMPO
Hay inquietud en el azul de tu sonrisa
cuando tu piel atraviesa
la imperceptible huella
de un pasado desacostumbrado.
Dispongo la pluma suavemente
sobre la tela en blanco
el color sobre mis dedos
y desordenados los sentidos
lanzo a babor y estribor
el inquieto espíritu de los bucaneros
a punto de asaltar un barco
y dejo que la voz distribuya
el canto que se desliza por mis manos
y mancha la tela
mientras sombras del tiempo
navegan por el círculo polar
de las costumbres.
CRUZ GONZÁLEZ CARDEÑOSA
Escuela de Poesía Grupo Cero
Taller Sábados 18h. Madrid
Coordinador: Miguel Oscar Menassa
Taller Sábados 17h. Madrid
Coordinadora: Carmen Salamanca Gallego
“ AL PASAR LA BARCA”
(Canción popular)
Al pasar la barca, me dijo el barquero
No me fijo en las niñas bonitas
Sólo en aquellos que me traen dinero.
Vidas que lo perdieron casi todo
Se adentran en el oscuro mar,
Ojos inmenso, llenos de esperanza y miedo
Cruzan el Estrecho
Creyendo dejar atrás, una vida de pobreza
Construyendo un sueño a veces imposible, en la gran ciudad.
A este lado del mundo, al que llamamos desarrollado
Se les acoge, como una mercancía más.
Mano barata en campos explotados
Aspirantes a un mísero jornal.
Madres con hijos, padres que dejaron su familia lejos.
Y tú te paras a pensar, seguramente yo haría igual.
Todos indiferentes, mientras políticos sin escrúpulos
los usan como moneda de cambio electoral.
Difunden una supuesta humanidad;
Otros les culpan por mermar aquellas partidas presupuestarias
Que nunca llegan a los demás.
Y el barquero sigue cobrando,
El rico enriqueciéndose
Las mafias extorsionando
A costa de la pobreza.
Mientras todos miramos a otro lado,
Los políticos los que más,
El pobre espera a que amaine el temporal
Para arrojar, de nuevo, su vida al mar.
MARIBEL DOMÍNGUEZ DUARTE
Escuela de Poesía Grupo Cero
Taller Domingos 19 horas - Alcalá de Henares
Coordinador: Carlos Fernández del Ganso
EL OTOÑO ROZA MI PIEL
Un surco en la faz de la tierra
adviene en los pliegues de la niñez
atesorando fábulas en la noche,
entre zanjas del recuerdo.
Los mapas trazados en la piel dorada
sobreviven a certidumbres
acariciadas por el empeño al descorrer
un dosel cada amanecer.
No hiere la palabra pérfida
si no se da el tono adecuado,
lo que hiende la piel
es lo arrecido de la mirada.
La tierra llega demasiado pardusca
para filtrar cualquier semilla
y no ofrece asilo a las lisonjas
trastrabilladas entre sombras.
Las hojas sin rociar solo dejan la oquedad
apesadumbrada al caer, ya no volverán a ser
las que brillen en la rama.
Ya la pretensión del fruto no madura,
hubo grandes riadas y
hay demasiado lodo en la desidia de esta fábula.
Un tono de fragmento acuñado en noches de luna llena
aflora en los surcos de mi piel,
mas nada que regalar
a las adulaciones atemporales,
sin límites, y sin vehemencia.
El otoño roza mi piel
y recuerda el recorrido hasta la claraboya
por la que asoma un atisbo de una vaga luz,
fruto de todas mis renuncias.
Nada que ofrecer a la vieja promesa
apaleada entre influjos de baja estirpe.
El otoño roza mi piel
y me zarandea entre visillos
reponiendo la fuerza olvidada
en el último anegamiento sobrevenido
en la despedida de otra era.
Nada que conceder a la brutalidad
que supone la caída de las hojas de un calendario sin rubricar,
que digo, las hojas del árbol sin rociar.
El otoño en mi piel resume el grito de la esperanza hecha añicos,
el retumbe de la voz al unísono clamando el pan de cada día,
ante la balaustrada magistral sin la garantía del podio.
El otoño invoca el cuidado ante ficticios estruendos,
señala las hojas que aún perduran en la rama
al celo de la osadía.
GLORIA GÓMEZ CANDANEDO
Escuela de Poesía Grupo Cero
Taller Domingos 19 horas - Alcalá de Henares
Coordinador: Carlos Fernández del Ganso
LIBROS PUBLICADOS
(Los viernes se publicarán poemas de libros de integrantes
de los Talleres de Poesía Grupo Cero)
(www.editorialgrupocero.com)
LA MUJER DEL OTOÑO
LLEGABA A MI VENTANA
Creí que era el otoño, que el frío de la calle arropaba
los límpidos cristales con un vaho que nublaba mi mirada.
No dudé, árboles y matorrales desnudaban sus cuerpos
lentamente,
a veces una ráfaga furiosa les arrancaba andrajos
dejando en el jardín los yertos troncos que, insolentes,
desafiaban al viento.
En la mirada, la nostalgia de un brillante estío,
en el cuerpo, en el frío que ganaba cada día un palmo
más de carne,
en el paso, la cadencia que reflejaba en mi ventana la
mujer del otoño
esa que reflejaba mi cuerpo en la bruma del cristal.
PILAR ROJAS MARTÍNEZ
Escuela de Poesía Grupo Cero
Taller Sábados 18h. Madrid
Coordinador: Miguel Oscar Menassa
Del libro "Mujer de otoño"
EN UN HILO PRENDIDO…
(23 de agosto de 2018, 12 de enero de 2020)
En un hilo prendido de aquel recuerdo,
dibujado o desdibujado en el fragoso rostro
de un noble tapiz,
en una ofrenda de hielo,
en un reverente lábaro,
dando el último adiós al blasón de una caverna de rocas.
Prendido en un predicado desierto,
en el deseo de una dama con vestigios de lo inhabitado,
prendido en el signo del árbol enramado de perpendiculares siluetas
en una obra carente de ciencias letras y arte.
En el rencor con un suspenso en la esencia,
en las mañanas que se convierten en sueños
y en las noches que deambulan en una petulante huella.
Prendido… en la foto en blanco y negro,
en el futuro a través de la puerta,
en el alma de lo etéreo.
en el beso sumergido en la roca,
en el sudario de otros,
prendido aunque tú y yo nos amemos?
ESTHER NÚÑEZ ROMA
Escuela de Poesía Grupo Cero
Taller Domingos 19 horas - Alcalá de Henares
Coordinador: Carlos Fernández del Ganso
COMIENZA TU VIAJE
Hoy perdoné un bostezo
y el vuelo de un ciempiés en mi estómago.
Vive llorando en un fondo acolchado,
ahogando de la pereza su gusto atónito a estanque.
Soy tres veces suya por el hecho de que confieso
haber guardado un gigante que me sobra en el tamaño.
Aparece ¡oh alado señor! Impulsando un salto,
pero amaina en su vestidura, enceguece con su fiebre
y hace un acordeón de carne, abrupto y hermético de palabra.
Se instala centelleante de ojeras
y tránsfuga me refugio en blandos versos.
¿Destapamos la toma del ocaso?
Quiere la gramínea libertad de campo,
las bujías del cataclismo, una fragua para invertir el fenómeno,
los pugilatos, ser pusilánimes a la terrible noche
¿Y si nos levantamos cuando se nos venga en gana?
Miro la prensa.
Vuelve la frontera, vuelve,
sin muro ni aduanas, pagando el peaje en ondas.
Hombre de brazo de oro,
que con tu sangre restañas risas y vida, púgil del verbo.
Miren, aquel no puso ni pesebre, ni bueyes, ni niño,
pero abrió un portal donde caían cobardes y opulentos
Todos los días amanecen ciegos repasando nervios,
pero en el rincón donde duermen,
el aire, manco, presiente al poeta.
También se sientan a batallar gigantes,
escampan y la lluvia, comienza su viaje.
LAURA LÓPEZ
Escuela de Poesía Grupo Cero
Taller Sábados 18h. Madrid
Coordinador: Miguel Oscar Menassa
Taller Sábados 17h. Madrid
Coordinadora: Carmen Salamanca Gallego
AZUL DEL TIEMPO
Desmesuradamente,
se extiende de este a oeste,
de norte a sur,
de arriba abajo,
en su letargo celeste,
la ilusión que ciñe
nuestros sueños.
Porque, después de todo,
¿A quién le importa
su truculenta atmósfera
de respiraciones incompletas?
Mientras el aire corra
a salvar en los pulmones
las aspiraciones
y las inspiraciones.
¿A quién le importa
que todo sea verdad
o todo mentira?
Si el color está
para dar vida a lo que
desde la eternidad
yacía muerto.
Si el azul del tiempo
no fuera más auténtico
que nuestras vidas
¿Cómo podríamos decir
“sí, de acuerdo”
y andar derecho
hasta llegar al trabajo,
y comer luego juntos
este alimento que tantas
manos escribieron
con su acento de vocales
devorando consonantes?
RUY HENRÍQUEZ
Escuela de Poesía Grupo Cero
Taller Sábados 17h. Madrid
Coordinadora: Carmen Salamanca Gallego
EMBUDO LOCO
La muerte inviste lo vivo, embudo loco,
esta royendo los huesos, negros hijos de calcio
en las calles, adoquines atrofiados vienen de lejos
han arrastrado la sangre seca, la historia de los vencidos.
Así inviste los cuerpos, las edades de los puños
así golpea los besos en espera, esperando.
Sobre la almohada, en los desfiladeros de la desdicha
intensa rama, concentra la fuerza en una cama inmóvil.
Inviste el escalafón de las ideas como agua perpetúa
abandona la sed de los niños y el barco maduro.
Hincha el estertor hacía los témpanos a la deriva
así la administración en maletas niega el abismo.
La contemplación inviste lo vivo, embudo loco,
amordaza el aire con una trompeta de patria.
Retraso, regreso de las manos a la celda
donde sentado el corazón inviste lo vivo.
CLÉMENCE LOONIS
Escuela de Poesía Grupo Cero
Taller Sábados 17h. Madrid
Coordinadora: Carmen Salamanca Gallego
LIBROS PUBLICADOS
(Los viernes se publicarán poemas de libros de integrantes
de los Talleres de Poesía Grupo Cero)
(www.editorialgrupocero.com)
ENTRE MOTORES
Escondidos,
en la tenue luz del hambre,
soñamos formas donde cruzarnos.
Entre artificios
surge el viento que borra la memoria.
Te amé lejos de tus labios,
en baños conducentes
al jardín de los pasos futuros.
HELENA TRUJILLO LUQUE
Escuela de Poesía Grupo Cero
Taller Sábados 18h. Madrid
Coordinador: Miguel Oscar Menassa
Del libro "Camino de tus labios"
SIN PRISA
Sin prisa no se puede escribir
porque las maniobras militares
tienen que hacerse rápido,
sin entenderlas. Un soldado
debe ser capaz de ejecutar,
un poeta debe ser capaz de ser
aunque los versos se los lleve
entre los pies el número
o los votantes.
KEPA RÍOS
Escuela de Poesía Grupo Cero
Taller Sábados 17h. Madrid
Coordinadora: Carmen Salamanca Gallego
SONETOS A TU SEXO IX
Ya sé que le han cantado a mi sexo de mujer los más altos juglares,
le han hecho versos de oro y han declamado virtudes y beldades.
Eso es lo conocido, pero ¿qué vate canta al tuyo, amado mío?
Yo, porque no hay otra, yo soy la poeta que te amó hasta al fondo.
Yo he de cantarte a ti, mi maravilla, sable precioso,
espiga maldorada, que el viento del deseo lleva y trae.
Eres batuta de la orquesta mía donde mueren de placer los músicos.
Eres la torre de las agonías, vientre con vientre, me trago tu fantasma.
Vivo en las gotas tenues que destilas y en el mar de mi boca tu pez ríe.
Me alimenta tu sed, en tu deseo crecen las altas nubes de mi clímax.
Tu sexo, que es lo activo, lo que avanza a pesar del silencio o de la ruina.
Tu sexo que perfora mis esquinas, al que hablo y a oírme se levanta.
Tu sexo de almidón y de esperanza, tu sexo con su ropa de domingo,
dimensión de mi goce, mi delirio, tu sexo de varón, entre mis fémures.
ALEJANDRA MENASSA DE LUCIA
Escuela de Poesía Grupo Cero
Taller Sábados 18h. Madrid
Coordinador: Miguel Oscar Menassa
PARAÍSO PERDIDO
“¡Paraíso perdido!
Perdido por buscarte,
yo, sin luz para siempre.”
(Rafael Alberti)
¡Ah, los hijos! los suyos y los míos, también,
son del mundo el acento patrio que les otorga pertenencia jurídica,
son de la ciencia, el certificado de recién nacidos vivos y la causa última
de la muerte.
Y desde la singular diferencia crecerán al amparo de la semejanza
entre otros frutos de la heráldica pasión nocturna estrellada.
Nuestros hijos y los vuestros, también,
serán amenazados de guerra, contaminados del odio sin amor
por la galopante ambición de la ignorante culpa.
Nuestros hijos, aprendieron a odiar. Sí,
mas, nunca dejaron de amar. Los suyos también tienen ese derecho.
¡Ah, los hijos!, ¡señor juez del cielo y la tierra y de todos los males del mundo
los suyos y los míos, también,
perdieron el vientre ingrávido de una libertad repleta de manzanas coloradas
y verdes doncellas y granadas gualdas y violetas de papel
y corazones de tambor y dulzaina.
Sus hijos y los míos, también,
son simiente del verso, alguaciles de nuestra vejez.
Respetemos lo nuevo, educar es imposible sin ley y aprender una tarea singular.
Ya lo escribió un sabio: “El niño es el padre del adulto”.
Aprehendamos cada madre y todos los padres, también,
la condena por ser hijos del alma y cuerpos del recuerdo.
Colaboremos para que la terrible locura que nos anida desde niños,
no dirija nuestras decisiones.
¡Que sea el sol del trabajo y la lluvia de la humanidad cayendo solemne
sobre nuestros hijos! la que tolere nuestras sombras.
¡Sea la cultura y los proyectos sociales
desde el manicomio a la cuna o desde la cuna al diván!
los que puntúen el omnívoro poder y la delirante espera de la única verdad.
Nuestros hijos y los vuestros, también,
con la virtud de sus sonrisas,
con su disciplina en el estudio,
con sus manos primorosas de pico y pala,
con pericia de pluma y pincel,
con sus cuerpos ágiles y esbeltos como bandadas de aves
vuelan al unísono en la voz, caminan y juegan canciones de alegría
Inventando chistes y mentiras cada día para seducir y soñar.
Señores diputados, señoras congresistas y viceversa,
desde el Paraíso Perdido, les pregunto:
¿qué mundo dejaremos a los hijos? y ¿qué hijos dejaremos al mundo?
CARLOS FERNÁNDEZ
Escuela de Poesía Grupo Cero
Taller Sábados 18h. Madrid
Coordinador: Miguel Oscar Menassa
REGRESO
Movía mi cuerpo iluminado por la noche,
cargado con un esqueleto de hierro.
Tenía cierta dificultad para esquivar elefantes sin aliento.
Cerradas las compuertas del alma.
Tenía en la mirada la crueldad del hielo amortajado,
las manos secas desbordadas de palabras olvidadas.
Tenemos miedo del hacha oxidada
que no mata y golpea cortando gotas de lluvia.
Tienen miedo del horizonte de granito
bebiendo mares alojándose en sus hombros.
Tengo miedo del silencio prestado,
del disfraz,
de que en el recuento no me nombren,
del accidente,
de que el sonido de las piedras sustituya a los abrazos.
Si te quieren envenenar,
si el calendario parece un charco de sangre,
si en la prensa las esquelas muerden los pactos imposibles,
habla,
y cuando cien mil ojos,
se giren mezquinos de sorpresa,
habla,
y si te aplauden o regalan las velas de un barco naufragado,
y si te dan una caricia o un golpe a traición,
y si te buscan o te huyen,
habla.
HERNÁN KOZAK CINO
Escuela de Poesía Grupo Cero
Taller Sábados 17 h. Madrid
Coordinadora: Carmen Salamanca Gallego
LIBROS PUBLICADOS
(Los viernes se publicarán poemas de libros de integrantes
de los Talleres de Poesía Grupo Cero)
(www.editorialgrupocero.com)
UNA MUJER SE INCLINA HACIA LA TIERRA
Una mujer inclina su osamenta
sobre la fresca hierba y arranca la maleza
pensando en el contacto de la tierra y su semilla.
Una mujer viste de negro desteñido,
tiene su piel curtida por el viento
y el sol no anida en sus bolsillos ni en sus piernas.
Una mujer entreteje los sueños del futuro
inclinada mirando la humedad y los terrones,
piensa en lo que no puede pensar
y se entrega placiente a los olores frescos
que salen de sus manos tirando de los tallos.
Dónde están mis preferidos...
y el patio se puebla ahora de palabras indecisas,
mil hojas verde amarillentas dibujan formas del murmullo,
ídolos caen de templos primordiales entre rituales polimorfos
entretejiendo nudos,
donde la memoria devuelve los espectros
y caen uno a uno los recuerdos,
un pasado brotado palpando el tacto verde
que enturbió la arboleda
agolpando las sombras
que querían beber la líquida espesura ahora
convertida en un árbol de viento, enredado en el aire.
Una abertura más allá de lo mirado se convirtió en su sexo
un pensamiento sin ideas,
sólo formas combinadas de diversas maneras
y dentro de ellas un anillo de cables conduciendo ecos, luces, deseos
cascadas de labios habitando las grietas donde el insecto
entreteje los hilos agrisados donde colgar la luna.
No hay adentro ni afuera,
el alfabeto es la madera del tronco calcinado
que murió entre las llamas,
incendio de resurrecciones,
y el tiempo, el tiempo que no vuelve,
es la inclinada cabeza que mira entre las hierbas
la estrella que se tiñó de verde
y que arrastró consigo el continente no geográfico
donde una mujer bebe el humo de su hoguera
y arranca la música nocturna
que las yemas de sus dedos no han inventado todavía.
NORMA MENASSA
Escuela de Poesía Grupo Cero
Taller Sábados 18h. Madrid
Coordinador: Miguel Oscar Menassa
Del libro "Graffitis en el cielo"
TENGO POR COSTUMBRE
Tengo por costumbre dejar que la costumbre
me abandone y que el abandono se haga costumbre.
Abandonar la que soy para ser otra,
Abandonar una edad para entrar en otra,
Un año por otro, la usura por la deuda.
Oh, pobres míos, de espíritu y de bolsillo,
los olvidados, del amor y del dinero.
Oh, la soledad de las cúspides sin sol,
de las aguas sin sombrías oscuridades.
Tus dedos son como la transmutación de los metales,
hacen brotar un alma en mí, una pasión imperecedera,
unos versos dispuestos a cerrar el paso
al cogito cronológico, al abuso de lo innato.
Tengo por costumbre pensar en vivos y muertos,
burlar el paso del tiempo que corta cabezas,
enfrentar la lejanía cuando Catulo y Dante cantan.
Tengo por costumbre quedarme perpleja
ante los sucesos de la vida cotidiana,
de los que desconocen el miedo a perder.
Hay epigramas que tienen sabor a espera,
otros mantienen intacta su capacidad de asombro.
AMELIA DÍEZ CUESTA
Escuela de Poesía Grupo Cero
Taller Sábados 18h. Madrid
Coordinador: Miguel Oscar Menassa
SABIOS POETAS
"No es grato morir , señor,
si en la vida nada se deja
y si en la muerte nada es posible,
sino sobre lo que pudo dejarse en la vida"
Cesar Vallejo
Sabios poetas
amantes de la vida,
antorchas que alumbran el camino
y ensanchan del hombre su mirada.
-¡Qué sería del mundo sin su valentía,
sin sus pensamientos iluminados,
sin sus aéreas predicciones de futuro,
sin el goce que transmiten sus palabras
tan cerca de la vida y de la muerte!
Vidas vividas para otros y con otros
lazos que nos atan al misterio,
Misterio incontrolable y tan humano
“Rayo que no cesa”, cadena de civilización
la poesía.
OLGA DE LUCIA VICENTE
Escuela de Poesía Grupo Cero
Taller Sábados 18 h. Madrid
Coordinador: Miguel Oscar Menassa
POEMA
“¡Paraíso perdido!
Perdido por buscarte,
Yo, sin luz para siempre”.
Rafael Alberti
En el paraíso te buscaba
y encontré la espuma del mar
en el papel hambriento de palabras.
Sangre encendida de alegre y torrencial sustancia,
por los amaneceres iluminados de plenitud.
Isla de amor por la que vale luchar y vivir.
Vendrá tu color como una jauría de aventura
Alzada lengua en la noche contra el terror
llamaradas para las hojas pese a todo crepúsculo.
Páginas escritas como flores
en la corriente marítima del tiempo.
Entrañas del papel en la patria
que vuelve a florecer.
Versos en todas direcciones
para un destino ciego por la lluvia de muertos.
Sucio, por el fuego de las cavernas,
arrastrado en silencio.
Y te encontré gritando
hasta apagar los incendios del alma
que en la oscuridad buscan consuelo
con la luz del poema que florece en la página
como un molino de viento.
VIRGINIA VALDOMINOS
Escuela de Poesía Grupo Cero
Taller Sábados 18h. Madrid
Coordinador: Miguel Oscar Menassa
TIERNO ESCALOFRIO
A Serena
Te vi Serena,
delicada flor,
hermosa,
con una mirada tan atenta
que el mundo se me quedó pequeño.
Sonríes
y lanzas mariposas
con tus pequeñas manos,
en un aleteo
que embelesa mi corazón,¡
alcanzando la médula.
De tus labios,
azucaradas cabriolas
derriten mi aliento,
y una baba cae por mi barbilla
fundida de júbilo.
Amable frenesí
¡diva de amaneceres!
desde tu primer día,
llevo tu encanto prendido en mi pelo.
ANA VELASCO
Escuela de Poesía Grupo Cero
Taller Sábados 16 h. Madrid
Coordinadora: Carmen Salamanca Gallego
LIBROS PUBLICADOS
(Los viernes se publicarán poemas de libros de integrantes
de los Talleres de Poesía Grupo Cero)
(www.editorialgrupocero.com)
A SOLAS CON LA TIERRA
Primero,
exceder límites tempestuosos,
sorteando la redundancia
de aceras y doblajes,
en un descender sin tregua
hacia el rincón último del movimiento.
Dentro,
parafernalia de emergencia
frente al tímido barracón del miedo,
escasa densidad en reciclaje
y nula estrategia de permanencia.
Después,
escabullirse entre cuerpos y miradas,
urbanas tribus de impronta vertical.
Para subir
cemento arriba en desmesura,
olvidarse de pasos y materia
hasta quedar, al fin,
a solas con la tierra.
CARMEN SALAMANCA GALLEGO
Escuela de Poesía Grupo Cero
Taller Sábados 18h. Madrid
Coordinador: Miguel Oscar Menassa
Del libro "Decido vivir"