Madrid, 01-06-23

EL MAR Y TÚ

 

La carrera del mar sobre mi puerta
es sensación azul entre mis dedos,
y tu salto impetuoso por mi espíritu
es no menos azul, me nace eterno.
Todo el color de aurora despertada
el mar y tú lo nadan a mi encuentro,
y en locura de amarme hasta el naufragio
van rompiendo los puertos y los remos.
¡Si tuviera yo un barco de gaviotas,
para sólo un instante detenerlos,
y gritarle mi voz a que se batan
en un sencillo duelo de misterio!
Que uno en el otro encuentren su voz propia,
que entrelacen sus sueños en el viento,
que se ciñan estrellas en los ojos
para que den, unidos, sus destellos.
Que sea un duelo de música en el aire
las magnolias abiertas de sus besos,
que las olas se vistan de pasiones
y la pasión se vista de veleros.
Todo el color de aurora despertada
el mar y tú lo estiren en un sueño
que se lleve mi barco de gaviotas
y me deje en el agua de dos cielos.

 

JULIA DE BURGOS
Puerto Rico-1914


Madrid, 02-06-23

VELAS SOBRE UN RECUERDO

Todo estático,
menos la sangre mía, y la voz mía,
y el recuerdo volando.

Todo el lecho es un cántico de fuego
echando a andar las ondas del reclamo.
La misma pared siente
que ha bajado a llamarte entre mis labios.

¡Qué grandioso el silencio de mis dedos
cuando toman el verso de los astros,
que se cuelan en rápidas guirnaldas
para esculpirte en luces por mis brazos!

Va gritando tu nombre entre mis ojos,l mismo mar inquieto y constelado.
Las olas más infantes te pronuncian,
al girar por mis párpados mojados.

Todo es ágil ternura por mi lecho,
entre cielos y ecos conturbados.
Con tu sendero vivo en mi flor íntima,
he movido lo estático...

JULIA DE BURGOS
Puerto Rico-1914



Madrid, 05-06-23


¿LLENA TU BLANCO FUEGO MI SENTIDO?

¿Llena tu blanco fuego mi sentido?
¿Hablo de mi camino transparente,
del nombre que me habita, del viviente
a veces escuchado y comprendido?

Crece una luz… su vuelo, su latido
son el poder de la criatura ardiente:
ángel guardián, amigo de mi frente,
memoria de un país que casi olvido.

Celeste donador: sin ti sería
la tierra negro aliento, masa fría,
isla ciega en las noches de su nada.

Ángel: cantemos el fulgor desnudo,
tus alas encendidas y tu escudo
y en mis ojos la tierra iluminada.

CLAUDIA LARS
El Salvador-1899


Madrid, 06-06-23

TE ELEVO SOBRE EL MUNDO Y EL SUEÑO

Te elevo sobre el mundo y el ensueño,
¡escultura de luz, de aroma y canto!
Ala impaciente, roce de tu manto,
tácito y puro en vida y en diseño.

Te sostiene mi verso, tan pequeño
-piedra de espuma, base del encanto-
y en vigilias y vórtices de llanto
sierva soy al servicio de mi dueño.

Toda belleza en ti dobla su gracia,
toda gracia precisa sus virtudes,
toda virtud aumenta su eficacia.

Se alza de mi verdad tu nombre fuerte
y en espacio de soles y laúdes
quiebra el ángulo frío de la muerte.

CLAUDIA LARS
El Salvador-1899


Madrid, 07-06-23


SI HABLASE DE TI


Si hablase de ti no pronunciaría
las sílabas supremas
pero besas bien y me gusta estar contigo.
Mi verde con tu azul.
Delirio de ramas.
Mi verde con tu azul.

Me abstengo de pronunciar esas sílabas sublimes
pero me gusta cómo abrazas y tu pelo hace juego con mi vestido.
Tus dedos patinan en mis medias.
Mi verde con tu azul.

YOLANDA CASTAÑO
España-1977


Madrid, 08-06-23

AMOR – II

¡Porque yo sé que tengo tanto amor en los brazos!
Así me pesan, hondos, graves como la vida,
un hijo o un amante, o un ramo de jazmines,
o un retazo de viento, o el talle de una amiga.

Aquí, en los brazos, siento gravitar las estrellas,
el pecho de Dios mismo, la dorada gavilla,
el vuelo de los pájaros, el corazón del mundo,
el peso inagotable de mi melancolía.

Aquí, en los brazos, todo. Los hombres y los astros,
el fuego de la tierra quemándose a sí misma,
las ilusiones rotas, los sueños consumados,
y las generaciones que arrancan de mi vida.

Aquí, en los brazos, todo. El peso de los años,
el peso misterioso de mi propia semilla,
la sinrazón del mundo pesando su mortaja
¡y el peso obsesionante, mortal, de la ceniza!

SUSANA MARCH
España-1918


Madrid, 09-06-23

LA CARICIA

La tarde taciturna se borraba
En medio de una calma dulce y quieta,
Y entre la sombra azul de la glorieta
El palor de la luna se filtraba.

Tu mano, toda nervios, deshojaba
Las flores de un rosal con una inquieta
Impaciencia, que a veces la secreta
Impulsión de un deseo apresuraba.

Y al cortar una rosa blanca y suave,
Que era como una palpitante ave
Que el azar en tu mano hubiera preso,

Con paso cauteloso te acercaste,
Por los ojos la rosa me pasaste
y yo sentí la sensación de un beso.

JUANA DE IBARBOUROU
Uruguay-1895
De “Las lenguas del diamante


Madrid, 12-06-23

¿LLENA TU BLANCO FUEGO MI SENTIDO?

Es el amor. Tendré que ocultarme o que huir.
Crecen los muros de su cárcel, como en un sueño atroz.
La hermosa máscara ha cambiado, pero como siempre es la única.
¿De qué me servirán mis talismanes: el ejercicio de las letras,
la vaga erudición, el aprendizaje de las palabras que usó el áspero Norte
   para cantar sus mares y sus espadas,
la serena amistad, las galerías de la biblioteca, las cosas comunes,
los hábitos, el joven amor de mi madre, la sombra militar de mis muertos,
   la noche intemporal, el sabor del sueño?
Estar contigo o no estar contigo es la medida de mi tiempo.
Ya el cántaro se quiebra sobre la fuente, ya el hombre se
levanta a la voz del ave, ya se han oscurecido los que miran por las ventanas,
   pero la sombra no ha traído la paz.
Es, ya lo sé, el amor: la ansiedad y el alivio de oír tu voz, la espera
   y la memoria, el horror de vivir en lo sucesivo.
Es el amor con sus mitologías, con sus pequeñas magias inútiles.
Hay una esquina por la que no me atrevo a pasar.
Ya los ejércitos me cercan, las hordas.
(Esta habitación es irreal; ella no la ha visto.)
El nombre de una mujer me delata.
Me duele una mujer en todo el cuerpo.

JORGE LUIS BORGES
Argentina-1899

De “El oro de los tigres”


Madrid, 13-06-23

POEMA

Se hace luz por el proceso
de eliminación de sombras
Ahora, las sombras existen
las sombras tienen exhaustiva vida propia
no de uno y de otro lado de la luz mas en el propio seno
                                                                                  [de ella
intensamente amantes      locamente amadas
y esparcen por el suelo brazos de luz cenicienta
que se introducen por la punta en los ojos del hombre

Por otro lado la sombra dicha la luz
no ilumina      realmente      los objetos
los objetos viven a oscuras
en una perpetua aurora surrealista
con la cual no podemos contactar
sino como los amantes
de ojos cerrados
y lámparas en los dedos      y en la boca

MÁRIO CESARINY
Portugal-1923
De “Antología poética”


Madrid, 14-06-23

POEMA

Reconozco este cuerpo impermeable
te reconozco      estás adormecido
el pecho muy abierto      las manos luminosas

El gran talento de tus dientes menudos

Hay el peligro de un grito airosísimo
cuando andas así      conmigo      en lo invisible

Cuando venga la mañana saldrás conmigo
hacia el espacio que nos falta      hacia el amor
que nos falta

La aurora
está fatigada

la aurora
como un río nuestro
en torno a los ascensores

Tenía yo la edad
de un marsellés
silencioso
                  y tímido
Tú me dabas la pizarra de los magos
tu      risa      las letras
        más oscuras del alfabeto

Fue hace mucho tiempo
      o ahora
en la caverna de los leones expresivos

La caverna que da a la caverna
la caverna      los lagos diligentes

Bello tú eres bello
como un gran espacio quirúrgico

Porque tú no tienes nombre      existes

Mi boca
sabe a tu boca

Mi boca
perdió la memoria
no puede hablar      las palabras
entran en su túnel
y no es necesario seguirlas

Dijo que eres alto
alto
blanco y despoblado

MÁRIO CESARINY
Portugal-1923
De “Antología poética


Madrid, 15-06-23

EN LA SOMBRA

Llegaba la noche con tono violento.
Llorando de miedo la tarde caída,
y en hondas y abiertas prisiones, se oía
correr desbocados los potros del viento.

Tomaba infinito contorno sangriento
el áspero traje que todo cubría.
Misterio en un símbolo negro reía,
mostrando en su risa terrible contento.

El Mal desataba los monstruos del Vicio.
Marchaba un apóstol hacia el sacrificio…
cantando sus grandes, sus fuertes ideales,

sus fuertes ideales cantando muy quedo…
Y allá, amenazada por sombras fatales
la tarde caía llorando de miedo…

EVARISTO CARRIEGO
Argentina-1883
De “Misas herejes


Madrid, 16-06-23

AMOR PERDIDO. LA JUVENTUD
XIII

Entretenido viento de los años pasados
se queja en mí, bordando una ilusión.

Quiere que volvamos juntos como antaño,
a ser la izquierda fragorosa del amor.

Decir no se lo digo, mas lo siento:

múltiples heridas hacen pensar mejor.
La dicha fue brutal, vana la gloria,
el amor se moría o quedaba maltrecho.

El viento, sin embargo, en su delirio,
no ceja en sus intentos, de que juntos,
volvamos a vivir altas, locas pasiones.

No quiero defraudarlo, mas le digo:

Mi cuerpo cae y no hay ningún abismo,
sólo esta fuerza escrita, esta quietud.

MIGUEL OSCAR MENASSA
Argentina-1940
De “Amores perdidos


Madrid, 19-06-23

EN EL BOSQUE

Los gnomos
de los secretos
se mesan
los cabellos.
Amarran a la Muerte
y ordenan a los ecos
que despisten al hombre
con sus espejos.
En un rincón
está el secreto
revelado,
muerto.
Lo lloran
sus compañeros.
Es un joven azul
con los pies de hierro
que tiene entre las cejas
un lucero.
Lo lloran
sus compañeros.
El lago verde tiembla.
Hace viento.

FEDERICO GARCÍA LORCA
España-1898
De “Suites”


Madrid, 21-06-23

NO MORIR

No morir
todavía no
demasiado pronto el cuchillo
el veneno, demasiado pronto
Todavía me amo
Amo mis manos que fuman
que escriben
Que sostienen el cigarrillo
La pluma
La copa.
Amo mis manos que tiemblan
que limpian a pesar de todo
que se mueven
Las uñas todavía crecen
mis manos
acomodan los anteojos en su sitio
para que yo escriba.

AGOTA KISTOF
Hungría-1935
De “Clous
Versión del francés de Mónica Mansour


Madrid, 22-06-23

EN LA SOMBRA

Fuimos educadas para la perfección:
para que nada fallara y se cumpliera
nuestra suerte de princesa-de-cuentos
infantiles.
¡Cómo nos esforzamos, ansiosas por demostrar
que eran ciertas las esperanzas tanto tiempo
atesoradas!
Pero envejecieron los vestidos de novia
y nuestros corazones, exhaustos,
últimos sobrevivientes de la contienda.
Hemos tirado al fondo de vetustos armarios
velos amarillentos, azahares marchitos
ya nunca más seremos sumisas ni perfectas.
Perdón, madre, por las impertinencias
de gallinas viejas y copetudas
que sólo saben cacarearte bellezas
de hijas dóciles y anodinas.
Perdón, por no habernos quedado
donde nos obligaban la tradición
y el buen gusto.
Por atrevernos a ser nosotras mismas
al precio de destrozar
todos tus sueños…

DAISI ZAMORA
Nicaragua-1950


Madrid, 26-06-23


HABITACIÓN DE HOTEL


No cama del todo, no del todo banco.
Papel pintado: un amarillo torvo.
Un par de sillas. Un espejo bizqueante.
Entramos, mi sombra y yo.

Con vibrante sonido abrimos la ventana;
se desliza hasta el suelo el reflejo de la luz.
Es la noche sin aliento. Lejanos perros
con variados ladridos fracturan el silencio.

Inmóvil, me quedo junto a la ventana,
y en la negra vasija del firmamento
como gota dorada de miel refulge
la pulposa luna.

Sebastopol, 1919

VLADIMIR NABOCOV
Rusia-1899


Madrid, 28-06-23

EL BREVE AMOR

Con qué tersa dulzura
me levanta del lecho en que soñaba
profundas plantaciones perfumadas,

me pasea los dedos por la piel y me dibuja
en el espacio, en vilo, hasta que el beso
se posa curvo y recurrente,

para que a fuego lento empiece
la danza cadenciosa de la hoguera
tejiéndose en ráfagas, en hélices,
ir y venir de un huracán de humo…

¿Por qué, después,
lo que queda de mí
es sólo un anegarse entre las cenizas
sin un adiós, sin nada más que el gesto
de liberar las manos?

JULIO CORTAZAR
Bélgica-1914


Madrid, 30-06-23

ELLA

En su perversa y desvergonzada maldad
Ella es, como las cenizas, gris o gris como el polvo.
Y estoy perdiendo de su cercanía,
De los bonos que sólidamente nos conectaron.

Ella es una tosca, es una espinosa,
Ella es una serpiente fría.
Con sus repulsivas escamas se divirtió cruelmente:
Ella me hace constantemente ser cocido al horno. ¡Si tan solo puedo sentir una agudeza de la picadura!
Ella es tan torpe, aburrido, tan todavía como la carne de vaca,
Es tan grande, es tan lánguida;
No tengo acceso a ella, es una sorda mortal.

Y ella inflexiblemente con sus anillos repulsivos
Siempre me acaricia y estrangula.
Y esta cosa irreal, esta cosa negra y horrible,
Esta cosa negra y monstruosa – ¡es solo mi alma!

ZINAIDA GIPPIUS
Rusia-1869


 

Selección de Poemas Editados
 

 

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