Madrid, 01-07-21

ESTA CABEZA PASEANDO POR EL MUNDO

Se oía silbar a través del espíritu
En el borde de la oreja vibradora
Semejante a una dulce histérica
que siente nacer sus fantasmagorías
Y crecer cosas adentro de la piel y sus imanes
Vibradora es la oreja a causa de las chispas
Y el ángel que nada enérgicamente
Entre las estatuas del cielo
En el ojo del cielo
Y acaso en su cabeza cruzada por el viento
Con su techo de cabellos ondulados como tejas
Su cabeza de cabeza sobre la tierra de tierra
Con sus colores y sus imágenes
Y el ojo que trepa por todas partes
Valiéndose de su resorte especial
El ojo marítimo que vuelve sudoroso y se ancla
   en el puerto
Como una golondrina que echa raíces
O una campanada que se convierte en árbol

VICENTE HUIDOBRO
Chile-1893
De “Ver y palpar”


Madrid, 02-07-21

MI PADRE SE CANSA

Después del esfuerzo
entrego mi último bostezo a la noche
y duermo.

Me permito luego
recorrer con severidad
hasta la hebra rubia
entretenida
en el primer mosquito de la noche

cubro maliciosamente
mi brazo desnudo
con el beso que deja mi madre
–sorprendida por mi presencia–
en un costado de mi cuerpo.

Y despierto
para aplaudir
alguna proeza de mi padre joven
que bebe junto a mí
una copa de vino
y una muchacha desconocida.

MIGUEL OSCAR MENASSA
Argentina-1940
De “Pequeña historia


Madrid, 05-07-21

PLACERES NOCTURNOS

También nosotros nos detenemos a saborear la noche
en el instante en que el viento es más puro: las calles
se enfriaron con el viento, cesaron las fragancias;
el olfato se orienta hacia las luces oscilantes.

Todos tenemos una casa que, en la oscuridad,
aguarda nuestra vuelta: una mujer nos espera,
   en la oscuridad
tendida en el sueño: la habitación está caldeada
   con fragancias.
Nada sabe de viento la mujer que duerme
y respira; la tibieza de su cuerpo
es idéntica a la que hay en la sangre que murmura
   en nosotros.

Este viento nos lava, ya que llega de lo profundo
de las calles abiertas de par en par a la oscuridad;
   las luces
oscilantes y nuestras fosas nasales contraídas
se agitan desnudas. Cada aroma es un recuerdo.
De la oscuridad más lejana, surgió este viento
que se precipita sobre la ciudad: allá abajo,
   por prados y colinas,
donde todavía hay pastos que el sol ha caldeado
y una tierra tiznada por humores. Nuestro recuerdo
es un áspero olor, la parva dulzura
de la tierra destripada que en invierno exhala
el hálito de su interior. En toda la oscuridad,
se esfumaron los aromas y a la ciudad no llega
   más que el viento

Regresaremos esta noche con la mujer durmiente,
con los dedos helados que buscan su cuerpo,
y un calor nos revolverá la sangre, un calor de tierra
tiznada por humores: un hálito de vida.
También ella se ha caldeado al sol y ahora descubre,
en su desnudez, su más dulce vida,
que desaparece de día y tiene gusto a tierra.

CESARE PAVESE
Italia-1908
De “Trabajar cansa


Madrid, 06-07-21

NOCTURNO II

La pieza desierta;
Cerrada está la puerta;
Se siente irse la luz.

Las sombras salen de debajo de los muebles,
Y allá lejos, los objetos perdidos
Se ríen.

La noche.

La alcoba se inunda.
Estoy perdido.
Un grito lleno de angustia;
Nadie ha respondido.

VICENTE HUIDOBRO

Chile-1893
De “El espejo de agua”


Madrid, 07-07-21

TODOS LOS DÍAS

Todos los días
llama a mi puerta el desconsuelo
Estoy vacía y su eco resuena
por todos los rincones de mi vida.
Se estremece mi sangre
que es un hilo de hielo
al faltarme el calor de tu presencia.
No comprendo el idioma del paisaje;
qué quiere decir sol,
cielo azul
aire.
No comprendo mi ritmo,
ni mi esencia,
ni por qué sigo andando,
respirando,
contemplando a la gente,
a los perros que pasan,
a los pájaros
que mi balcón visitan diariamente.
Ni por qué la mirada,
mis ojos,
abarcan el entorno que me envuelve.
Ya no comprendo nada.
El mundo se me ha vuelto
un compañero extraño
que camina a mi lado
y no conozco.
¿Qué quiere decir vida?
Ya no encuentro
aquel sabor que un tiempo me dejara.
Las palmas de mis manos
se cierran sin calor,
desconsoladas.
Que eran tuyos tu casa y tu paisaje;
que está en ellos la huella de tus pasos,
el hueco de tu cuerpo.
Y está la casa llena
de tu recuerdo.

JOSEFINA DE LA TORRE
España-1907
De “Marzo incompleto


Madrid, 08-07-21

MANERAS DE SER

¿...Y qué decir de tales revelaciones y metamorfosis
   en animales flores actos y posturas extrañas en las
   curtiembres de espumas a lo largo de bocas que se
   cruzan a gritos reclamando una brasa del océano y
   una caricia en los labios...?
el loco aullido de estas sábanas donde hierve el amor
   ahora y no después ni en escaparates con obscenas
   ropas de mujer ni bajo las piedras partidas por el rayo
ni en reliquias ni oraciones ni siquiera en pirámides
   siniestras conservando siglos de besos y las emanaciones
   del oro y las joyas
ahora porque la región del deseo se transforma continua-
   mente en cuerpos que despiertan en el fondo de sus
   venas y lanzan destellos a través de implacables vestidos
¡oh! aquí y no contra los hilos secos de mi carne y sólo
   donde extiendo mis muslos junto a los tuyos donde se
   arrodilla el verano de los adioses y la luna refriega su
   aceite de tumbas en la superficie de gentes que rememoran
   elogios y sexos

¡Y no hay salida para mí!
¡No hay salida para mí entre los muros alados de la tierra!

ENRIQUE MOLINA
Argentina-1910
De “El pasajero de la habitación nº 23


Madrid, 09-07-21

NACIMIENTO DEL POETA

VII

Hacia los mundos
que el hombre desconoce como mundos.
Hacia esos recorridos del alma no realizados,
vuelo, hacia las huellas que el hombre,
dejará sobre la tierra.

Vuelo, azul, sobre los dientes de la noche,
ato al perfume de tus nalgas, mi soledad.
Sucumbo en ese cráter cósmico,
descanso en paz, entre tus brazos.

MIGUEL OSCAR MENASSA
Argentina-1940
De “La patria del poeta


Madrid, 12-07-21

DOINAS
5

Amada, en la noche fresca
hay un ruiseñor que canta...

Y canta con tal nostalgia
que las hojas caen y mueren...

Y canta con tal ternura,
que se desprenden del árbol..

Y canta con tal tristeza
que cae la hoja y perece...

DOYNAS Y BALADAS
POPULARES RUMANAS

Traducción: María Teresa León y Rafael Alberti


Madrid, 13-07-21

LÁMPARAS AGOTADAS

Lámparas agotadas
enfermedades pintadas sobre un abanico
las uñas se adhieren a los frascos vacíos
pintura de navíos cubiertos de conchillas
lámparas agotadas
la luz se calla
en el escenario desierto y mudo de un teatro estupefacto
un pájaro tiembla de fiebre
y sus plumas caen como los dientes de un árbol
búhos acostados en lechos de delirio
ya no hay fósforo ni azufre
ni petróleo ni carbón
la nieve al derretirse da un agua negra
avenidas definitivamente secretas

lámparas frías lámparas agotadas
lámparas agotadas

RAYMOND QUENEAU

Francia-1903
De “L'instant fatal”


Madrid, 14-07-21

HACIA LA NOCHE

Es tarde
en la sombra y en el viento
un grito asciende con la noche
No espero a nadie
a nadie
ni siquiera a un recuerdo
Hace ya tiempo que pasó la hora
pero ese grito que lleva el viento
y empuja hacia adelante
viene de un lugar que está más allá
por encima del sueño
No espero a nadie
pero aquí está la noche
coronada por el fuego
de los ojos de todos los muertos
silenciosos
Y todo lo que debía desaparecer
todo lo perdido
hay que volver a encontrarlo
por encima del sueño
hacia la noche.

PHILIPPE SOUPAULT
Francia-1897
De “Poésies complètes


Madrid, 15-07-21

OTOÑO EN 1930

Sobrecogida, bajo el arco cándido
de los vientos azules,
arrojo desde mi balaustrada en avance,
(como labios que van a besar),
la mirada hacia el océano amarillo.

Todo vive ese olor mojado
de rasal llovido y de naranja;
el gato -flor de cardo de invierno-
se electriza y se hace cantar,
las moscas buscan las vigas ahumadas,
las gallinas cloquean y sacuden su ropa interior;
y mi corazón
trata de acomodar su tristeza de velos desgajados,
descalza y sin pupilas.

WINÉTT DE ROKHA
Chile-1894
"Antología de la poesía latinoamericana de vanguardia"


Madrid, 16-07-21

TE DOY MI ALMA

           Te doy mi alma desnuda,
Como estatua a la cual ningún cendal escuda.

           Desnuda como el puro impulso
De un fruto, de una estrella o una flor;

De todas esas cosas que tienen la infinita
Serenidad de Eva antes de ser maldita.

           De todas esas cosas,
           Frutos, astros y rosas.

Que no sienten vergüenza del sexo sin celajes
y a quienes nadie osara fabricarles ropajes.

 

¡Sin velos, como el cuerpo de una diosa serena
Que tuviera una intensa blancura de azucena!

¡Desnuda, y toda abierta de par en par
Por el ansia de amar!

JUANA DE IBARBOUROU
Uruguay-1895
De “Las lenguas del diamante


 

Selección de Poemas Editados
 

 

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