VI. AUTORRETRATO
Detrás de los ojos nadie aguarda
una hora de paz ni renuncia a vivir:
por el temblor del iris
la arruga esbozada sobre el labio
o las cejas mientras piensa
(ese dibujo inmóvil y despierto)
pasan innumerables sucesos
en capas imborrables
y en mínimas esperas
El tiempo recupera sus gestos
enhebrados en un andar brumoso
El retrato se sueña
en el dolor del mundo
La figura renace
cuando se extinguen los trazos
de la mirada
ALBERTO LUIS PONZO
Argentina-1917
De "Labio oscuro de nacer"
PERO JAMÁS
Pero jamás me pidas la tristeza guardada.
(Hay una flor que late y un pájaro que llora
y para no escucharme el alba se demora
porque yo sigo siendo la nunca acompañada.)
De estar un poco mía y otro poco cansada
aquí dentro se rompe una humedad sonora;
y soy la que antes era, la de después de ahora;
la misma soñolienta mujer hecha de nada.
¡Pero jamás me toques el corazón difuso!...
(¿Por qué será, Dios mío, el único que uso?)
Perdida absurdamente en la carne que pienso
me voy volviendo pobre, pequeña como adarme,
y por saberlo todo, ya no quiero salvarme
de esta sangre que tiene un azul indefenso.
CARILDA OLIVER LABRA
Cuba-1922
De "Error de magia”
PON TU RECUERDO
Pon tu recuerdo aquí, de madrugada,
de bar violeta, de dolor que había.
Yo volveré la página y en cada
sueño con que nombres la poesía
habrá sólo una muerte dibujada
con la palabra amor, sin todavía.
Pon tu recuerdo, ingle navegada,
disparo tierno, luto, vida mía.
Pon tu recuerdo aquí de pasajera
luna que dio en mi lágrima, de fiera
cuenta que estoy debiéndole al verano.
Pon tu recuerdo de temblor perdido
que alguna que otra noche me ha traído
el todo hasta este hueco de mi mano.
CARILDA OLIVER LABRA
Cuba-1922
De "Sonetos”
OPERACIÓN NOCTURNA
Alguien sopla.
Sopla contra mi casa una envoltura de cortinajes negros,
una niebla sedienta que husmea como hiena en los rincones,
unas sombras que incrustan trozos de pesadilla en la pared.
Alguien sopla y convoca los poderes sin nombre.
Mi guarida se eriza,
se agazapa en el foso de las fieras,
resiste con su muestrario de apariencias a los embates de la mutación.
Alguien sopla y arranca de sus goznes mi precaria morada,
las maquinarias de su remota realidad.
Ahora es otra y no es y apenas vuelve a ser en más o en menos,
tan amenazadora y tan falaz como una escena blanca espejeando
en la nieve
o la ventana que se enciende y se apaga en la espesura del tapiz.
Pero igual la sofocan en su temblor final con un funda helada,
la separan de sus mansas costumbres,
le quitan una a una sus misericordiosas pertenencias con un duro
escalpelo.
La convierten en la trampa feroz sobre las bocas del abismo que
viene.
¡Y yo que reclamaba solamente un lugar en torno de mis huesos!
¿No había para mí nada más que esta cárcel,
estos muros aviesos, fatales hacia abajo,
esta tensa tiniebla que me arroja de subsuelo en subsuelo?
OLGA OROZCA
Argentina-1920
De "Mutaciones de la realidad"
HOY TROPECÉ CON UNA RAMA
DEL BOSQUE Y SENDERO
Hoy tropecé con una rama del bosque y el sendero
me pegó con su puño de musgo en el corazón.
Quedé jadeando un instante.
Cualquier animal se felicita de encontrar algo que comer
y lo bendice aún después de ingerirlo.
Dicen que mis ojos son los del ave rapaz, los del tigre:
en ellos una corona amarilla rodea el iris.
A pesar de que tengo los ojos azules*
bajo esta bóveda celeste.
Cuando llega la nieve soy verde y marrón; justo del color de la tierra.
Muchas veces una mano gruesa
ha intentado enjugarme
como a una lágrima absurda al borde de un pañuelo.
Lo ha intentado insistentemente.
Pero siempre he vuelto a reñir otra vez por
el derecho a vivir
a la manera del bosque,
tan verde, tan marrón, en la tierra del color de la tierra.
Con el tierno soy tierna, no se me puede engañar.
Miro a los ojos del animal fijamente y hablan los milenios en silencio.
Cansada, exactamente con mil años de edad,
pero nunca tan preparada para el combate como ahora.
En el corazón una pluma o el diente de una fiera.
Lista para las caricias o el golpe.
Sin dudar, vamos, deprisa.
Sola, ahora.
*Nota del trad.: "sinisilmäinen", es decir,
"de ojos azules
en Finlandia es indicativo de ser una persona ingenua.
SIRKKA TURKKA
Finlandia-1939
De "Poesía finlandesa actual"
EL POETA FUE A LA FUENTE
El poeta fue a la fuente
y nunca más regresó.
En la fuente lo esperaban
su amor, la Poesía, y una mujer.
Y cuando, ingenuamente, preguntó:
“¿Por qué la Poesía viene con una mujer?”.
La mujer no dijo nada y la Poesía,
con cierto sarcasmo, sonrió.
El poeta comenzó a sentirse aprisionado:
“La celda soy yo mismo, decía,
pero ellas son las carceleras”.
Y de tanto estar juntos, nos amamos.
Y nos amamos tanto que comenzamos a volar.
En pleno vuelo, la Poesía contestó:
“Sin mujer, sin amor, sin contingencia,
nunca ya nadie escribirá un poema”.
Junio, 2015
MIGUEL OSCAR MENASSA
Argentina-1940
De "Política y Amor.
Lo que nunca te contaron"
REMEMORO TU SONRISA
Rememoro
tu sonrisa, y es para mí como el agua límpida
hallada al azar en la pedrera de un arenal,
exiguo espejo en el que mira una hiedra sus corimbros;
y encima el abrazo de un tranquilo cielo blanco.
Ese es mi recuerdo; no sabría decir, en la distancia,
si en tu rostro se expresa libre un alma ingenua,
o si verdaderamente eres un fugitivo que el mal del mundo
extenúa
llevando su sufrir consigo como un talismán.
Mas esto puedo decirte, que tu imaginada efigie
sumerge mis caprichosas inquietudes en una oleada
de calma,
y que tu semblante se insinúa en mi gris memoria
sencillo como la copa de una joven palmera...
EUGENIO MONTALE
Italia-1896
De "Huesos de sepia”
LA MUERTE
Ni miedo ni esperanza
acompañan al animal que muere;
el hombre aguarda su final
temiendo y esperando todo;
muchas veces murió,
muchas se levantó de nuevo.
Un gran hombre con su orgullo
al enfrentar asesinos
hunde en el escarnio
la cesación del aliento.
Él conoce la muerte a fondo -
el hombre creó la muerte.
WILLIAM BUTLER YEATS
Irlanda-1865
Traducción de Gerardo Gambolini
UNIDAD
En esta noche mi reloj jadea
junto a la sien oscurecida, como
manzana de revólver que voltea
bajo el gatillo sin hallar el plomo.
La luna blanca, inmóvil, lagrimea,
y es un ojo que apunta... Y siento cómo
se acuña el gran Misterio en una idea
hostil y ovóidea, en un bermejo plomo.
¡Ah, mano que limita, que amenaza
tras de todas las puertas, y que alienta
en todos los relojes, cede y pasa!
Sobre la araña gris de tu armazón,
otra gran Mano hecha de luz sustenta
un plomo en forma azul de corazón.
CÉSAR VALLEJO
Perú-1892
De "Los heraldos negros"
VEO ABRIRSE
FUTURO EN TUS ENTRAÑAS
Veo abrirse futuro en tus entrañas,
veo inflamarse mi corazón de dicha.
Ataco sin piedad mis versos anteriores
y escupo la cara del oro y la miseria.
Soy el loco Siglo Veinte, estoy espantado de mí.
Hago el amor y contraigo enfermedades incurables.
Trabajo con ahínco y deseos para ser explotado.
Escribo bellos versos para metérmelos en el culo.
Todo está calculado para mí, menos mi ansia.
Todo está computado para mí, menos mi deseo.
Todo está ordenado para mí, menos mi hambre.
Cuando escribo se rompen los relojes
y ese futuro abierto en mis entrañas,
se libera, se hace carne en el mundo.
MIGUEL OSCAR MENASSA
Argentina-1940
De "Poemas y cartas a mi amante loca joven poeta psicoanalista”
ADIÓS
El coche
se ha llevado mi última moneda.
¿A qué hora sale el tren para Marsella?
París
me acompañaba
con toda
su inverosímil belleza
despidiéndome.
El barro
de la despedida
ensombrece mis ojos.
Mi corazón sentimental
me estremece.
Hubiera querido vivir
y morir en París
si no hubiera existido
esa tierra:
Moscú.
(1925)
VLADIMIR MAÏAKOVSKI
Rusia-1893
De "Poesía"
INTELECTUAL SIN CLASE DEFINIBLE
Intelectual, sin clase definible,
abierto a la sospecha de las horas,
obrero de la nada, patrón del tiempo,
inefable poeta del amor y la muerte.
No vengo, por ventura, buscando nada.
Ni las ondas malignas de nostalgia.
Ni el corazón sangrante de un poema.
Ni el fugitivo dinero, ni personas.
Estoy aquí por los olores del viento.
Por la penetrante caricia de las olas.
Por palpitantes estrofas, por palabras.
Por palabras dispersas sobre todo el océano,
por un océano frío, abierto en mi garganta,
por esas perlas negras arrancadas del alma.
MIGUEL OSCAR MENASSA
Argentina-1940
De "Poemas y cartas a mi amante loca joven poeta psicoanalista”