Madrid, 01-02-13

UN SENTIDO ILUMINADO Y CIERTO


digo amiga y digo lentamente
las formas del viento y la madera
digo un momento un fuego
una bondad un río una fe
un nacimiento un aire
un sentido iluminado y cierto

digo amiga con palabras con horas
con ojos con adioses
con claridad y sombras
y una estrella

y tan especial
tan solo
y verdadero
es este amor
y tan cumplido en sí mismo
tan abierto
y rico y generoso
que dejémoslo ya
sin tocarlo
mirándolo a distancia
o démosle la mano
y marchemos con él
adonde quiera
sin ver
y sin dudar
y sin cuidado
 

EDGAR BAYLEY
Argentina-1919
De “Todo el viento del mundo”


Madrid, 04-02-13

METAMORFOSIS DEL CLAVEL
4

Me fui.
Las conchas están cerradas.
Aquel ciego olor a espuma
siempre se acordó de mí.

Siempre me buscaba.

Me fui.
Estoy torciendo limones
a un plato de agua salada.
Siempre me acordé de ti.

Siempre te encontraba.

Me fui.
Las conchas siguen cerradas.

RAFAEL ALBERTI
España-1902
De “Entre el clavel y la espada”


Madrid, 05-02-13

POEMAS PARA ELAINE ORR
VII

cuando
yacemos juntos
mis pequeños senos se convierten en dos puntiagudas torres
   firmes y maravillosas, y
restriego ardorosamente el cariño de mi vientre contra ti

tus brazos son
jóvenes;
tus brazos me convencerán, hablando en completo silencio
sobre mi cuerpo
su esencial y leve lenguaje.

no te rías de mis muslos

hay entre mis grandes piernas una animada ciudad.
cuando me tocas
surge la primavera en la ciudad; las calles se retuercen grácilmente,
es por tu causa; no las atemorices,
todas las casas se aprietan vigorosamente
cuando llegas:
y se alegran
cuando llenas de niños las calles de mi ciudad.

amor mío, eres una resplandeciente montaña que siente.
eres una empinada montaña y una palpitante isla cuyas
vigorosas laderas descansan en ese yo que se estremece, que está
debajo de ti, en torno tuyo, eternamente: soy el mar que todo lo abarca.
Oh montaña, no puedes huir de mí
tus raíces están ancladas en mi silencio; así pues, Oh montaña,
asesina hábilmente mis pechos, ahora y siempre

te abrazaré solemnemente deslizándote dentro de mí.

EDWARD ESTUKUB CUMMINGS
Estados Unidos-1894

De “Etcétera”


Madrid, 06-02-13 

POEMAS TARDÍOS
I

Han adornado el cielo con flechas.
Escudos de jubilosas llamas, y yelmos de esplendor,
Puñales y dagas de silbante luz, y furiosas espadas.

Han adornado el lago con alas de mariposas nocturnas,
Manchas de púrpura, y tupidas calideces de oro.
Perezosos y extraños vinos, y curvadas cuajadas de plata.

Han adornado mi corazón con un ocaso,
Melodiosas flores, y aladas llamas en libertad,
Muerte y amor: cenizas de rosas, cenizas de ángeles.

EDWARD ESTUKUB CUMMINGS
Estados Unidos-1894

De “Etcétera”


Madrid, 07-02-13

VERDAD HIRIENTE

Verdad hiriente
la verdad
de unos labios enamorados.

Allí donde la noche desanima
a los pequeños pobres taciturnos
en una voz extrema nace el amor.

Discreta alegría de saberme vivo.

Hoy amo la vida en general
y los pequeños pastos verdes
en el sosiego de la tarde.

Vivir enarbolando
mi propia piel
como bandera.

MIGUEL OSCAR MENASSA
Argentina-1940
De “La poesía y yo”


Madrid, 08-02-13

BALADA DE LO QUE NO VUELVE

Venía hacia mí por la sonrisa
Por el camino de su gracia
Y cambiaba las horas del día
El cielo de la noche se convertía en el cielo del amanecer
El mar era
un árbol frondoso lleno de pájaros
Las flores daban campanadas de alegría
Y mi corazón se ponía a perfumar enloquecido

Van andando los días a lo largo del año
¿En dónde estás?
Me crece la mirada
Se me alargan las manos
En vano la soledad abre sus puertas
Y el silencio se llena de tus pasos de antaño.
Me crece el corazón
Se me alargan los ojos
Y quisiera pedir otros ojos
Para ponerlos allí donde terminan los míos
¿En dónde estás ahora?
Qué sitio del mundo se está haciendo tibio con tu presencia
Me crece el corazón como una esponja
O como esos corales que van a formar islas.
Es inútil mirar los astros
O interrogar las piedras encanecidas
Es inútil mirar ese árbol que te dijo adiós el último
Y te saludará el primero a tu regreso
Eres substancia de lejanía
Y no hay remedio
Andan los días en tu busca
A qué seguir por todas partes la huella de sus pasos
El tiempo canta dulcemente
Mientras la herida cierra los párpados para dormirse.
Me crece el corazón
Hasta romper sus horizontes
Hasta saltar por encima de los árboles
Y estrellarse en el cielo.
La noche sabe qué corazón tiene más amargura

Sigo las flores y me pierdo en el tiempo
De soledad en soledad
Sigo las olas y me pierdo en la noche
De soledad en soledad
Tú has escondido la luz en alguna parte
¿En donde?, ¿en dónde?
Andan los días en tu busca
Los días llagados coronados de espinas
Se caen se levantan
Y van goteando sangre.
Te buscan los caminos de la tierra
De soledad en soledad
Me crece terriblemente el corazón
Nada vuelve
Todo es otra cosa
Nada vuelve nada vuelve
Se van las flores y las hierbas
El perfume apenas llega como una campanada de otra provincia
Vienen otras miradas y otras voces
Viene otra agua en el río
Vienen otras hojas de repente en el bosque
Todo es otra cosa
Nada vuelve
Se fueron los caminos
Se fueron los minutos y las horas
Se alejó el río para siempre
Como los cometas que tanto admiramos

Desbordará mi corazón sobre la tierra
Y el universo será mi corazón

 

VICENTE HUIDOBRO
Chile-1893
De “El cuaderno del olvido”


Madrid, 11-02-13

YA A LOS PIES DE JESÚS

Este pozo florece sobre el brocal su agua.
Y este ungüento es ya noble porque toca tu planta.
Déjame que te beba, dale Tú a mi alma
esa agua que surte de tu hermosa garganta.

El olor de mi cuenco poblado de tu aroma
es memoria de Ti, cuya presencia invoca
el nardo que te pide, que de tu piel se toma
la dulce suavidad que unge lo que toca.

Agua y perfume tuyos. ¡Oh Señor del camino!
Pastor y gran labriego del corazón cansino,
al verte y al tocarte yo toda me ilumino
de la aurora redonda de tu verbo divino.

Soy fragante mujer, y peco por amor...
¡Tú lo sabes y hablas conmigo, Tú, Señor!

CARMEN CONDE
España-1907
De “Mujer sin edén”


Madrid, 12-02-13

NOSTALGIA DEL HOMBRE

Una espada encendida revolviéndose,
defendiéndonos el Árbol de la vida.
¡Ángeles no tuvo el de la ciencia,
flanqueando su acceso!

”Acércate, varona” –te dijo la serpiente.
Y te acercaste sumisa.
Dios se paseaba por el Huerto,
al aire de su Día.
Ansias tuvo de mí: “¿Dónde estás tú...?”
¡Desnudo me encontré,
con fruto de tu sed sobre mi carne!
Una espada hay ahora, ¡una lumbre!,
que no nos deja ir... ¿Por qué no ardía
antes que tu voz junto al manzano?

¡Ríos que yo vi sumisos míos,
muy lejos ya de mí, aunque ahora nos nombre!

Los cuatro vivos miembros del gran agua
que éramos nosotros por su cauce.
Canté su nombre a todo: aves del cielo,
bestias de los campos, a las flores.
Cayóse el sueño a mí, y ya dormido
te hicieron de mi espalda, mujer mía.
Me buscar y te busco; el hambre tuya
es hambre de ti en mí. Yo te deseo.

¡Oh tierra que te aprietas a mis lados:
yo tengo que labrarte, que mullirte,
que soy también de tierra en mi transcurso!
Subiendo están de ti dulces vapores
regándote la faz. Hueles a hembra,
y soy quien te fecunda, prolongándote.

CARMEN CONDE
España-1907
De “Mujer sin edén”


Madrid, 13-02-13

EL POETA

El poeta es ave, en verdad:
es ave que canta y gime;
que Dios, es menos sublime,
y más que la humanidad.
Su nido es la inmensidad,
nido que el mal no derrumba.
¡Haced que el poeta sucumba,
destruid su ideal bendito,
que él entrará al infinito
por la puerta de la tumba!

RUBÉN DARÍO
Nicaragua-1867
De “Poesías anteriores a “Azul””


Madrid, 14-02-13

SOÑAR

Las mujeres solteras sueñan de varios modos.
Unas sueñan con joyas, otras sueñan con flores,
otras sueñan con vagos y tímidos amores.
¡Son mis ardientes sueños tan distintos de todos!

Porque son mis deseos rebeldes a la brida
-como potros- yo sueño con músculos de atleta
repujados en bronce; con la fecunda veta
de una vena que arrastra, en tumulto, la Vida;

con caricias audaces; y con el beso acre,
mordaz y calcinante de una boca de lacre.
Transfigúrome entonces y, en pasional derroche,

soy lingote de plomo. Me enciendo al rojosombra.
Me fundo en el aliento de aquel que no se nombra.
Renazco entre sus brazos. ¡Y así toda la noche!

ALFONSINA STORNI
Suiza-1892
De "Antología mayor" 


Madrid, 15-02-13

EL EXTRAÑO DESEO

Ser de oro, de una pieza trabajada al cincel,
con ojos de turquesas y rubíes por boca,
los dientes burilados sobre cristal de roca
y en la frente esmeraldas imitando laurel.

El todo de un aspecto fantástico y cruel;
algo como una estatua con aspecto de loca;
una mujer de oro, cuyo desnudo evoca
al Diablo contemplando telas de Rafael.

Sin corazón, sin alma. Fría como el misterio.
Una muerta que nunca logrará el cementerio.
Una muerta que espera frente a la Eternidad.

Cuyos ojos de piedras, ciegos pero brillantes,
sean faros extraños fijos y alucinantes
símbolo
s de la incógnita de la felicidad.

ALFONSINA STORNI
Suiza-1892
De "El dulce daño" 


Madrid, 18-02-13

AFÁN

No, no me basta, no.
Ni ese azul en delirio
celeste sobre mí,
cúspide de lo azul.
Ni esa reiteración
cantante de la ola,
espumas afirmando,
síes, síes sin fin.
Ni tantos irisados
primeros de las nubes
-ópalo, blanco y rosa-,
tan cansadas de cielo
que duermen en las conchas.
No, no me bastan, no.
Colmo, tensión extrema,
suma de la belleza
el mundo, ya no más.
Y yo más.
Más azul que el azul
alto. Más afirmar
amor, querer, que el sí
y el sí y el sí.
La tarde ya en el límite
de dar, de ser,
agota sus reservas:
gozos, colores, triunfos;
me descubre los fondos
de mares y de glorias,
se estira, vibra, tiembla,
no puede más.
lo sé, se va a romper
si yo le grito esto
que ya le estoy gritando
irremisiblemente
a golpes:
”Tú, ya no más; yo, más.”

PEDRO SALINAS
E
spaña-1891
De “Fábula y signo”


Madrid, 19-02-13

OJOS DE DIAMANTE

Quiero escribir palabras de estas noches
en díficil o claro indivisibles;
un puñal está alzado entre los coches
y hay bocas con espinas invisibles.
Acumulan tesoros los fantoches
y tremenda vergüenza de inservibles;
te contemplo tan Alto sin derroches
y todas mis consultas son posibles.
Qué hacer qué hacer enorme de la tierra;
se marchita el amor sin las palabras
y este silencio herido nos aterra.
Grandes resurrecciones sin olores:
túnel que es un infierno entre las cabras
y tropieza deshecho en tus temores.

CONCEPCIÓN SILVA BELINZÓN
Uruguay-1903
De "Sitios abandonados" 


Madrid, 20-02-13

LAS SIN PRUEBAS

¡Cuando te marchas, qué inútil
buscar por donde anduviste,
seguirte!
Si has pisado por la nieve,
sería como las nubes
-su sombra-, sin pies, sin peso
que te marcara.
Cuando andas
no te diriges a nada
ni hay senda que luego diga:
”Pasó por aquí”.
Tú no sales del exacto
centro puro de ti misma:
son los rumbos confundidos
los que te van al encuentro.
Con la risa y con las voces
tan blandamente
descabalas el silencio
que no le duele, que no
te siente:
se cree que sigue entero.
Si por los días te busco
o por los años
no salgo de un tiempo virgen:
pero no hay señal:
no dejas huella detrás.
Y podrás negarme todo,
negarte a todo podrás,
porque te cortas los rastros
y los ecos y las sombras.
Tan pura ya, tan sin pruebas,
que cuando no vivas más
ya no sé en qué voy a ver
que vivías,
con todo ese blanco inmenso
alrededor, que creaste.

PEDRO SALINAS
E
spaña-1891
De “Fábula y signo”


Madrid, 21-02-13

NUBÍFERO ANHELO

¿Si intentara una nube
una pequeña nube,
modesta,
cotidiana,
transportable,
privada?

Quizás con el recuerdo,
el cansancio,
la pipa,
después de algunas noches
y de mucha paciencia.

¡Qué alivio el de sentirla debajo del sombrero,
o saber que nos sigue
como si fuera un perro!

OLIVERIO GIRONDO
Argentina-1891
De “Nocturnos”


Madrid, 22-02-13

VISITA

No estoy.
No la conozco.
No quiero conocerla.
Me repugna lo hueco,
la afición al misterio,
el culto a la ceniza,
a cuanto se disgrega.
Jamás he mantenido contacto con lo inerte.
Si de algo he renegado es de la indiferencia.
No aspiro a transmutarme,
ni me tienta el reposo.
Todavía me intrigan el absurdo, la gracia.
No estoy para lo inmóvil,
para lo inhabitado.

Cuando venga a buscarme,
díganle:
               “Se ha mudado”.

OLIVERIO GIRONDO
Argentina-1891
De “Nocturnos”


Madrid, 25-02-13

¿SABÍAS QUE VOLVÍA?

¿Sabías que volvía?
¿Me esperabas?

Sangrante y taciturno
después de mil fracasos
casi sin esperanzas
me sumergí
por ir volando detrás de ti
en pesados cielos
infinita selva de la locura.

No estás pero te anuncian
verdes desesperados.
No estás pero en la selva
todo me habla de ti.

Aullidos de los cráneos
no soportando el viento
el huracán de versos
la tempestad de amor.

Pequeños corazones arrastrados
por fuertes correntadas.
Pequeños corazones arrojados
lejos del corazón.

No estás pero te nombra
el ruido de los pájaros.

No estás pero en la selva
todo me habla de ti.

MIGUEL OSCAR MENASSA
A
rgentina-1940
De “La poesía y yo”


Madrid, 26-02-13

LA VOZ A TI DEBIDA
[Fragmento]

No, no dejéis cerradas
las puertas de la noche,
del viento, del relámpago,
la de lo nunca visto.
Que estén abiertas siempre
ellas, las conocidas.
Y todas, las incógnitas,
las que dan
a los largos caminos
por trazar, en el aire,
a las rutas que están
buscándose su paso
con voluntad oscura
y aún no lo han encontrado
en puntos cardinales.
Poned señales altas,
maravillas, luceros;
que se vea muy bien
que es aquí, que está todo
queriendo recibirla.
Porque puede venir.
Hoy o mañana, o dentro
de mil años o el día
penúltimo del mundo.
Y todo
tiene que estar tan llano
como la larga espera.
Aunque sé que es inútil.
Que es juego mío, todo,
el esperarla así
como a soplo o a brisa,
temiendo que tropiece.
Porque cuando ella venga
desatada, implacable,
para llegar a mí,
murallas, nombres, tiempos,
se quebrarían todos,
deshechos, traspasados
irresistiblemente
por el gran vendaval
de su amor, ya presencia.

PEDRO SALINAS
E
spaña-1891
De “La voz a ti debida”


Madrid, 27-02-13

LA VOZ A TI DEBIDA
[Fragmento]

Sí, por detrás de las gentes
te busco.
No en tu nombre, si lo dicen,
no en tu imagen, si la pintan.
Detrás, detrás, más allá.
Por detrás de ti te busco.
No en tu espejo, no en tu letra,
ni en tu alma.
Detrás, más allá.

También detrás, más atrás
de mí te busco. No eres
lo que yo siento de ti.
No eres
lo que me está palpitando
con sangre mía en las venas,
sin ser yo.
Detrás, más allá te busco.

Por encontrarte, dejar
de vivir en ti, y en mí,
y en los otros.
Vivir ya detrás de todo,
al otro lado de todo
-por encontrarte-,
como si fuese morir.

PEDRO SALINAS
E
spaña-1891
De “La voz a ti debida”


Madrid, 28-02-13

LA VOZ A TI DEBIDA
[Fragmento]

Ha sido, ocurrió, es verdad.
Fue un día, fue una fecha
que le marca el tiempo al tiempo.
Fue en un lugar que yo veo.
Sus pies pisaban el suelo
este que todos pisamos.
Su traje
se parecía a esos otros
que llevan otras mujeres.
Su reló
destejía calendarios,
sin olvidarse una hora:
como cuentan los demás.
Y aquello que ella me dijo
fue en un idioma del mundo,
con gramática e historia.
Tan de verdad,
que parecía mentira.

PEDRO SALINAS
E
spaña-1891
De “La voz a ti debida”


Selección de Poemas Editados
 

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